Rahab hace su primera reunión en Filipinas
La fuerza de la mujer se une con la fuerza de la fe que está en Dios
05/03/2013 a las 04:50 a.m.
El Proyecto Rahab en Filipinas celebró su primera reunión mensual en el país desde el mes de Enero. El grupo cuenta con voluntarias que tienen como objetivo principal es tratar a las mujeres víctimas de todo tipo de abuso y violencia doméstica.
En la reunión, el proyecto proporcionó a todas las invitadas a una tarde con actividades en grupo, asesorías basadas en el servicio público en favor de los derechos de la mujer, así como el apoyo espiritual que a su vez fue impartido por Ruth Nunes, líder de Proyecto Rahab en Filipinas.
Ruth transmitió un mensaje de vida y de esperanza, llevando a que las mujeres presentes entendieran el amor que Dios tiene para cada una de ellas. La líder también destacó la importancia de recurrir a Dios en tiempos difíciles porque Él está siempre atento a los que buscan de ayuda y refugio en Él.
"Clama a Mí en el día de la angustia; Te libraré y tú me honrarás" Salmos 50: 15.
Aunque las víctimas sufrieron o sufren de agresiones físicas, verbales, emocionales y sexuales, la mujer tiene mucha fuerza. Una fuerza que no es física, ella viene junto con la fuerza de la fe y de la fuerza que hay en Dios. Lo que hace posible superar cualquier situación, tener una vida nueva y conquistar los sueños que parecían imposibles.
Después de la conferencia general, cada persona tuvo la oportunidad de recibir una asesoría individual compartiendo un poco de su historia para lograr finalmente superar sus problemas con la ayuda de las voluntarias del proyecto.
Proyecto Rahab ayuda a las víctimas de la violencia doméstica
El grupo comenzó a trabajar hace dos años y está presente en varias ciudades
03/03/2013 a las 04:50 a.m.
En Brasil, cuatro de cada 10 mujeres han sufrido violencia doméstica. Una de cada cinco cree que sufrieron algún tipo de violencia por parte de un hombre, conocido o desconocido. Cada 10 brasileños seis conocen alguna mujer que fue víctima de maltrato en el hogar. Las estadísticas también revelan que el machismo (46%) y el alcohol (31%) son los principales factores que contribuyen a este tipo de violencia.
A pesar de la existencia de la Ley Maria da Penha, que prevé medidas legales contra los infractores, el miedo sigue siendo el principal motivo (68%), para evitar que las mujeres realicen denuncias. En el 66% de los casos los responsables de los ataques son los maridos o compañeros. Muchas de las víctimas de agresión no saben cómo lidiar con el trauma causado por estos abusos y no tienen a nadie a quien recurrir.
Ante esta triste realidad, nació el Proyecto Rahab. La autora del proyecto, la escritora Cristiane Cardoso, menciona que el objetivo del grupo es ayudar a las mujeres que sufren este tipo de violencia: "En el curso de nuestro trabajo, nos dimos cuenta de que había un mayor y profundo problema con las mujeres que fueron víctimas de abuso, y ellas necesitan nuestra ayuda".
El trabajo de Rahab
El trabajo del grupo cuenta con el apoyo de voluntarias, que prestan un apoyo especializado, como es el asesoramiento jurídico, psicológico, social y emocional. De acuerdo con la coordinadora del proyecto en Sao Paulo, Carlinda Tinoco las voluntarias visitan las delegaciones de Defensa de las mujeres para llegar hasta las víctimas "Todos los lunes y martes, son días de alto índice de violencia, vamos hasta esas mujeres y entablamos un contacto directo con ellas", dice.
Carlinda cuenta que las voluntarias hablan e invitan a las víctimas de abusos a las reuniones y conferencias de grupo. Incluso con el corto tiempo de existencia, el proyecto ya está presente en varias ciudades brasileñas.
Restauración en cada reunión
En Río de Janeiro por ejemplo la primera reunión de 2013 recibió ocho nuevas supervivientes, que asistieron a la reunión por primera vez. Se unieron a las que ya venían con frecuencia desde el año pasado.
Para recibir a las víctimas de abusos en la reunión, las voluntarias del proyecto colocaron corazones pegados en las paredes que tenían palabras tales como: debilidad, restauración, omisión, reinicio, perdón, amistad, prejuicio y vergüenza.
De acuerdo con una de las voluntarias, Rachel Nacimiento el trabajo consiguió motivar a las víctimas para hablar de sus sentimientos. "Para nuestra sorpresa, una de ellas, que estaba por primera vez pidió que se hablara más sobre la palabra "restauración" y nos llevó hasta las lágrimas cuando dijo que por esa palabra estaba allí porque ahora podía creer que el dolor tiene un fin pues a cargado un inmenso dolor debido a un matrimonio contaminado por la violencia doméstica".
Segunda Tarde del Te para el Proyecto Rahab en Portugal
Voluntarias de Oporto y de Lisboa en acción para rescatar el valor de las mujeres
13/02/2013 a las 04:50 a.m.
En enero, el Proyecto Rahab realizo en las ciudades portuguesas de Lisboa y Oporto la "Segunda Tarde del Te" evento en el que las invitadas participaron en las conferencias dedicadas a combatir la violencia contra las mujeres.
En Oporto la abogada Fátima Lopes, aconsejo sobre cuestiones jurídicas en casos de violencia doméstica y explico los procedimientos para las mujeres que quieren tener la seguridad de sus derechos con respecto a ese sufrimiento. En Lisboa la psicóloga Lydia, habló del rescate y de la defensa del valor de la mujer.
Tal valor, de acuerdo con Lydia y Fátima afrontaron las presentes y este no se pierde por el simple hecho de que una mujer haya sufrido humillaciones e insultos. Se utilizó la metáfora de un billete de un dólar que incluso mal cuidado, ser pisoteado, no pierde su valor expresado en el papel documento, lo cual hace que la explicación sea muy fácil de entender.
Las ponentes dejaron claro: La primera persona que tiene que apreciar a la mujer es ella misma. Y en ella se nota en ese valor, si va a invertir en sí misma. "¿Cómo puedo invertir en mí misma?", fue la pregunta que varias asistentes se hicieron. En un debate organizado, algunas de ellas llegaron a algunas conclusiones que pueden parecer triviales, pero tienen un fuerte significado: al ir a la peluquería, al ejercitar su cuerpo, al cuidar de su belleza. En fin: cuando ellas demuestran que se aman.
De este cuidado exterior y aparentemente sin importancia para los más incautos, se abre el camino para un bien más importante: el interno. Las voluntarias de Rahab, finalmente pudieron hablar sobre el dolor, el sentimiento que muchas mujeres maltratadas llevan consigo. Un peso que debe ser descartado para que las mujeres puedan proseguir hacia adelante. Este dolor es una prisión, y la vida real sólo ocurre después de que una mujer se deshace de este sentimiento.
"El dolor es como un vaso de veneno que una persona se toma deseando que a otra le haga daño. Pero eso nunca va a suceder”. Es perjudicado aquel que tiene ese sentimiento; explico una de las colaboradoras del grupo.
En una oración fuerte, las presentes entendieron que deben determinar el fin del dolor en sus vidas, incluso pidiendo a Dios para que perdone a aquellos que causaron su sufrimiento. Este acto de valentía fue seguido por un alivio que muchas de las asistentes querían, pero que antes no sabían cómo conseguirlo.
Las mujeres que tomaron la decisión fueron abrazadas por las voluntarias del Proyecto, representando el abrazo de Dios, y como Él las acepta.
En Oporto, las participantes escribieron en secreto algo que les gustaría ver realizado. Los papeles fueron guardados en una caja. Las voluntarias del Proyecto se reunirán en oración para que el Señor mire los deseos escritos y los realice conforme a su voluntad.
Muchas de las mujeres presentes en la "Segunda Tarde del Te" del Proyecto Rahab vieron a la reunión como un punto a partir del cual sus vidas comenzaron a entregarse a Dios, con toda confianza y felicidad.
El 17 de febrero, habrá más una Tarde del Té que se llevará a cabo en las mismas dos ciudades cuyas direcciones son:
Lisboa: Alameda D. Afonso Henriques, 35.
Puerto: Rua Egas Moniz, 485.
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